Tras la marcha del sábado 1 de abril el gobierno nacional, que participó de su organización pero ante el temor de no poder exhibir suficiente adhesión prefirió quedar en la sombra, tomó más valor para insistir con el rumbo de su política económica y profundizar, desde lo político, las diferencias con el kirchnerismo a quien elige como adversario electoral y con quien pretende polarizar en octubre.
Más allá de ser Cambiemos una coalición, Marcos Peña y Gustavo Lopetegui intentarán hoy hablarle a los propios y en función de eso es que se convocó una reunión entre ambos funcionarios y los legisladores PRO, dejando fuera del convite a los aliados radicales y lilitos.
La excusa, no obstante, es "coordinar la estrategia parlamentaria". Y la cita será a las 19 en el Congreso.
Tampoco está confirmada la presencia del presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, quien hacia el interior de Cambiemos mantiene diferencias con Peña en cuanto a la estrategia política, como lo viene explicitando desde finales del año pasado.
En cuanto al paro general convocado para este jueves, al igual que el propio Mauricio Macri, Peña redobla la apuesta y sostiene que "no es contra Macri o contra el gobierno" sino que "termina siendo contra el país". Además afirmó que hay sectores sindicales que quieren una "agenda de ruptura y conflicto".
"El paro nacional no ayuda en nada la realidad de los trabajadores porque no tiene ni una consigna puntual, no tiene una demanda específica. No hay absolutamente ningún tema que la CGT haya planteado en estos 15 meses que no haya sido atendido por este gobierno", indicó Marcos Peña en conferencia de prensa en Casa de Gobierno tras la firma de un acuerdo federal para la construcción de viviendas.
En ese marco, el jefe de Gabinete y una de las principales espadas discursivas del macrismo. hizo un "llamado a la reflexión" de los dirigentes gremiales ante la medida de fuerza programada para esta semana, que -según consideró- "no es contra Macri ni contra el gobierno sino que termina siendo contra el país".
"Esa plata que Argentina pierde en el paro es plata que dificulta y retrasa el desarrollo que necesitamos", aseveró Peña, quien no obstante recalcó que el gobierno "respeta ese derecho a huelga, y a la libertad de expresión, así como a la posibilidad de estar en desacuerdo".
Ante los motivos del paro, Peña consideró que "en la búsqueda de la unidad de la CGT, que valoramos y apoyamos, aquellos sectores que buscan imponer esa agenda de ruptura y de conflicto para que le vaya mal al cambio en Argentina, terminan arrastrando a sectores que buscan ser más responsables y que, aún con diferencia de perspectiva, han buscado trabajar para mejorar la realidad de los trabajadores".
Por último, el jefe de Gabinete dijo que el gobierno "nunca se fue ni se irá de ninguna mesa de diálogo" e insistió en que "el camino nunca será por el lado de romper el diálogo y aislarnos en nuestras posturas personales".
"La democracia se divide entre aquellos que creen que esas diferencias nos fortalecen y nos obligan a buscar consensos y aquellos que creen que las diferencias son la fuente de un conflicto, que hay que exaltar posiciones y romper toda instancia de diálogo", concluyó.
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